jueves, 28 de enero de 2010

Un niño que se llama Carlos, es cariñoso, alto y delgado.
Un día Carlos iba por la calle y se encontró a un amigo. Iban andando los dos y de repente el amigo de Carlos se cayó por un barranco.
Carlos pensó: Si le ayudo a subir, me haré daño. Pero con un acto de valentía fue a ayudarle. Le alzó la mano y lo subió.
Su amigo le dijo: Gracias. Él contestó: De nada.
AUTOR: Diego López Avilés 4º C

No hay comentarios: